Princesa de Burundi, es el nombre comercial que recibe en Europa. Este nombre está dado por que los primeros ejemplares importados fueron recolectados precisamente en Burundi.
También se lo conoce como, cíclido cola de lira, pero para la mayoría de los aficionados acuaristas es simplemente brichardi.
Es uno de los peces emblema del lago Tanganica. Quien haya querido incursionar en el armado de un acuario con peces de dicho lago, seguramente penzo en tener al menos un brichardi.
Comencé a criar esta especie cuando todavía trabajaba en el acuario “Daniel’s Mar”, en la ciudad de Bs. As. Fue por recomendación del señor Gabriel Furlani. Compañero de trabajo por ese entonces y conocido acuarista.
Mas allá de la belleza de la especie, criar brichardis es una gran experiencia. Este cíclido tiene la particularidad de combinar, carácter y sociabilidad. Algo no muy común en los ciclidos del genero lamprologus. Puede formar un clan y tener toda una jerarquía social altamente definida y controlada, con el fin de preservar la especie y defender su prole.
Crearan colonias a partir de una pareja progenitora. Sus crías crecerán y a su vez cuidaran de la siguiente camada que más adelante ayudara en la cría de las próximas. Este fuerte lazo comunal hará que la colonia pueda aniquilar a cualquier otro ejemplar que no pertenezca a esta o incluso hasta otro brichardi introducido con posterioridad. Pero de ninguna manera depredara contra un integrante del clan.
Su reproducción por lo tanto es más que sencilla. Solo hay que proporcionarles un ambiente ideal. Acuario mínimo de 60lts para una pareja y con rocas donde hacer cuevas. Buena calidad de agua, y parámetros correctos para peces africanos.
Se puede alimentar a las crías con nauplios de artemia y alimento para alevines. Con el tiempo aceptaran el mismo alimento que los adultos.
El tamaño máximo de este pez es de 10cm en machos y algo más chicas las hembras.
Sin lugar a dudas un excelente pez tanto para principiantes como para expertos. Por belleza, carácter, por las satisfacciones que provoca y que no puede faltar a la hora de formar un acuario del Tanganica.
S.C.A.
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